Doña Petrona marcó una era, una época, una forma de mostrar la cocina. Sus recetas, su forma, su fiel compañera Juanita. Son casi cuatro décadas de carrera. Ella comenzó lo que miles siguen haciendo hasta el día de hoy. “Batimos a punto nieve y llevamos a treinta minutos de heladera”, dicen muchos en los canales de cable. Pocos con la gracia de Petrona Carrizo de Gandulfo. Sin dudas, un ícono en la cultura argentina.
Desde el 14 de junio y hasta el 28 de agosto, Fundación PROA exhibe "Patria Petrona", una muestra que hace gala de la majestuosidad de la artista de la cocina. De martes a domingo, de 11 a 19 horas, el tradicional Caminito, sitio de la Fundación, se viste de delantal blanco de cocina para recibir a los paseantes que quieran probar el sabor de la infancia nacional.
Se trata de un proyecto interdisciplinario ideado por el director, actor y dramaturgo Alfredo Arias, y con el diseñador Pablo Ramírez y el artista Juan Stoppani en colaboración. La exhibición cuenta con réplicas de tortas en cerámica, trajes (“nadie come una torta sin un traje”, en palabras del artista) y algunas pinturas. En el auditorio, se da expone un espectáculo de recitado, “Tortazo”, protagonizado por Arias, que remite a los recursos culinarios, consejos familiares y femeninos, en pocas palabras, al “estilo Petrona”.
“Patria Petrona es un homenaje a la memoria, a la capacidad de cada uno de nosotros de reconstituir el paisaje donde crecimos, ese lugar donde las palabras, los gestos, los perfumes, las imágenes quedarán para siempre grabados y harán parte de nuestra persona. Definirán nuestra percepción del mundo adulto.”
Doña Petrona representa mucho más que su imagen. Representa un universo de vivencias para aquellos que crecieron viendo su cocina. Colores, texturas y sabores imaginarios se mezclan en la exhibición.
Pase y pruebe.
Michelle Volpin
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