"La historia no es mecánica. El hombre es libre para transformarla". Ernesto Sábato se comprometía con lo que decía, y para no ser menos, se encargó de hacer historia. Fue un gran escritor y ensayista, pero ante todo, un hombre simple. Vivió hasta su último día en su casa de Santos Lugares, donde todos lo conocían como a un vecino más. Afirmaba que la mayoría de sus personajes “salían del corazón” y que elegía los temas “por instinto, y nunca a través de la razón”. A 100 años de su nacimiento y tan solo dos meses de su ida, Buenos Aires lo despidió como se merecía.
El Ministerio de Cultura de la Ciudad fue el encargado de la organización de un fin de semana lleno de propuestas para homenajear al genial escritor, autor de grandes obras como “El túnel”. El viernes 24, día en que Sábato hubiese cumplido 100 años de vida, se entregaron ejemplares de “Cuatro hombres de pueblo”, una de sus obras, en distintas estaciones del subte y premetro.
Ese mismo día a las 14 horas se encontraron lectores y admiradores de Sábato en Juramento y Vuelta de Obligado para participar de una visita guiada por los caminos del barrio que supo inspirar al novelista para escribir “Sobre héroes y tumbas”.
En el Centro Cultural Recoleta se dio un ciclo de cine inspirado su vida y obra. Algunas de las películas que se proyectaron fueron “El poder de las tinieblas” y “Ernesto Sábato, mi padre”, dirigidas por su hijo Mario.
El sábado 25 se leyeron fragmentos de su obra acompañados por un bandoneón en la Torre de Babel de libros.
Sábato vivió 99 años y pasó por diferentes países. Por este motivo fue testigo de muchísimos y diversos momentos históricos del mundo. Guerras, dictaduras, mundiales, catástrofes naturales, grandes movimientos del arte, nuevos inventos y descubrimientos, entre otras cosas. Viajó por el mundo como delgado del Partido Comunista de Argentina. Recibió un Doctorado en Física en la Universidad de La Plata. Presidió la CONADEP que encabezó la investigación luego de la última dictadura militar y publicó el "Nunca Más". Fue amigo de Jorge Luis Borges. Se pelearon por razones políticas. Una vida llena de grandes, confusos, atrevidos e interesantes pasajes. Una vida vivida a pleno y un legado literario que seguramente lo trascenderá muchos centenarios más.
Michelle Volpin
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